San Jorge, unido a Cristo en la victoria contra el mal.
La Resurrección del Señor, que nos llama a la Vida Plena, significa pelear siempre contra el mal. El 23 de abril celebramos a San Jorge, cuya vida fue sentir la protección de Dios para luchar contra el maligno y derrotarlo. Su nombre, proveniente del griego, significa “agricultor, que trabaja en la tierra” y, a pesar de ser un santo muy popular, pocos datos se conocen de él.
Nacido en Turquía en el siglo III, pronto se vió estimulado para seguir el oficio de militar, que ejercía su padre. Según cuenta la tradición, que caracteriza su historia más conocida, un dragón asoló la zona de Libia, atemorizando a los habitantes de los pueblos más próximos. Entonces, Jorge -como le pasó a David con Goliat-, se ofreció para luchar contra aquella alimaña, pidiendo que orasen por él para que venciese en tan singular combate.
Encomendándose él también al cielo, logró la victoria que buscaba en el nombre de Dios. Posteriormente, profundizó más en el mensaje del Evangelio, donde el Señor invita a dejarlo todo para tener un Tesoro en el Cielo. Así es como vendió todos sus bienes, distribuyendo las ganancias entre los pobres y renunciando a su antigua carrera militar. Guiado por su celo evangélico, se enfrentó a las autoridades romanas, representadas entonces por los Emperadores Diocleciano y Maximiliano.
A
ello se unió el recrudecimiento de la persecución hacia todos los que
creen en Jesús. Así, tras ser detenido por declararse cristiano y alentar
desde la Fe a quienes iban a sufrir el martirio, San Jorge murió
decapitado al comenzar el siglo IV, en Lyda (Palestina) y su
culto se difundió posteriormente por muchos territorios. En la actualidad son varios los países que tienen a San Jorge como su Santo Patrón, al igual que en el caso de la Comunidad Autónoma de Aragón. (Fuente: Ecclesia)
Feliz Día de San Jorge. Feliz Día de Aragón.