Desde la Parroquia de Santa Ana recibimos con alegría al nuevo Santo Padre y oramos para que el Espíritu Santo guíe su pontificado.
«La paz sea con vosotros. Este es el primer saludo de Cristo resucitado y buen pastor que ha dado la vida por el rebaño de Dios. Quisiera que este saludo de paz llegue a vuestros corazones, alcance a vuestras familias, en donde quiera que se encuentren, en todos los pueblos.
Todavía conservamos en nuestros oídos a esa voz débil, pero siempre valiente, del Papa Francisco, que bendecía a Roma y al mundo entero aquella mañana de Pascua. Hoy me piden dar seguimiento a esa bendición. Dios nos ama. El mal no prevalecerá. Todos estamos en manos de Dios.
Somos discípulos de Cristo. Cristo va delante de nosotros. El mundo necesita su luz. La humanidad necesita una vía hacia Él, un puente para ser alcanzados por Dios y su amor. Ayudémonos los unos a los otros a construir puentes, a través del diálogo y el encuentro.»
(Extracto del primer discurso de León XIV tras su elección como Papa)